No. 072/2016
Ciudad de México, a 27 de abril de 2016
PRIMERA SALA ATRAE AMPAROS SOBRE LA SUSTRACCIÓN INTERNACIONAL DE UNA MENOR Y LA NEGATIVA DE RESTITUIRLO
En sesión de 27 de abril de 2016, la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) resolvió las solicitudes de ejercicio de las facultades de atracción 538 y 539, ambas de 2015, a propuesta de la Ministra Norma Lucía Piña Hernández, cuyo tema tiene que ver con la sustracción internacional de un menor y la negativa de restituirlo.
Ante dicha negativa, el padre del menor, en el entendido de que este último fue trasladado de Estados Unidos de América a México, interpuso recurso de apelación. La Sala Civil confirmó lo anterior, ya que éste no acreditó, en términos de las excepciones previstas en la Convención Sobre Aspectos Civiles de la Sustracción Internacional de Menores, que tenía a su favor la custodia total del menor, además de que se demostró el grave riesgo que ocasionaría la restitución debido a que tiene antecedentes criminales por abuso de menores. Inconformes, ambos progenitores promovieron amparo, mismos que se solicitan atraer para su conocimiento.
La Primera Sala atrajo los dos amparos directos promovidos, pues estimó que éstos tienen una íntima relación con el interés superior del menor, ya que su sustracción y retención tienen un alto potencial de impacto sobre sus derechos, por lo cual es conveniente desarrollar criterios que los protejan de la mejor manera en controversias de esta naturaleza.
Además, teniendo como punto de partida el interés superior del menor, podrá establecerse con qué pautas debe evaluarse si un niño se ha integrado a su nuevo ambiente, así como a qué estándar de prueba debe demostrarse que la restitución comporta un riesgo físico o psíquico para el menor.
Finalmente, también servirá para fijar postura respecto de las causales extraordinarias señaladas en el artículo 13 de la citada Convención, como lo es que exista un grave riesgo de que la restitución en cuestión lo exponga a un peligro físico o psíquico o que de cualquier otra manera ponga al menor en una situación intolerable.